Sé que muchas personas sufren por problemas de dependencias emocionales, y le es muy difícil superar este estado por más que lo intenten
Si este es tu caso, o dudas, sigue leyendo. En este post te voy a hablar de experiencias para que te puedas sentir identificada y te voy a dar tips que te van a ayudar a enfrentarte a ellas.
Si así fuese, no te preocupes.
Sí, es posible superar las dependencias emocionales y llevar una vida super normal. Yo lo he conseguido, así que cualquiera puede. Y te voy a decir cómo lo hice.
Bueno, lo de que lo he conseguido me refiero a llevar una vida super normal, de hecho, super buena. Pero las dependencias emocionales aunque más o menos lo he superado bastante, de tanto en tanto aparecen. Pero nada que ver con lo que era antes.
¿Cómo logré superar mis dependencias emocionales?
Déjame que te cuente cómo lo hice.
Siempre fui una persona muy dependiente. Al principio y por muchos años, me limité a sentir y padecer sus consecuencias sin enterarme siquiera de qué me estaba ocurriendo. Pero en mis relaciones más íntimas siempre acababa teniendo problemas.
Luego fui creciendo y oí hablar de todas estas cosas: dependencias emocionales, enredos emocionales, adicciones, engancharme a personas…
¡Pero si esa soy yo! pensé. Ahora entiendo lo que me pasa… Y empecé a hablar con super propiedad de dependencias emocionales. Yo era dependiente emocional.
Cuando tienes dependencias emocionales, sufres. No tienes libertad porque dependes de alguien. Siempre.
De pequeñita y ya entrada en la adolescencia, dependí mucho, muchísimo de mi madre. Para mí, mi madre lo era todo. Me acuerdo que me llevaba a la peluquería a que me cortaran el pelo y yo no abría boca. Ella dirigía toda la operación. Sabía lo que me quedaba bien, lo que quería para mí… Todo.
También me ocurría cuando iba a clase, o en cualquier ámbito de mi vida. Siempre había alguien super especial y de quien yo dependía totalmente.
Cuando empecé a estar en mi primera relación de pareja, también me ocurrió. Yo dejé de existir. Para mí sólo era importante lo que quería la otra persona. Lo era todo.
Yo nunca pude cortar una relación de pareja aunque estuviera super mal en ella. Siempre me acababan dejando. Yo era incapaz de hacerlo.
¿Qué sé ahora de dependencias emocionales?
Que muchas veces son inherentes a la vida. Ya el querer a alguien, implica cierta dependencia. Yo al principio pretendía liberarme de todas mis dependencias emocionales, y convertirme en una persona emocionalmente independiente. No va de eso. Conseguir eso es prácticamente imposible.
Pero si que puedes conseguir vivir tu vida a pesar de las dependencias emocionales y que éstas disminuyan mucho.
Y de tanto en tanto aparece alguien que parece que se vuelva a apoderar de tí, y es entonces cuando tienes que poner en práctica todo lo que sabes y más para no permitir que se lleve tu estabilidad emocional. ¿Cómo? aferrándote a tu día a día. Por eso es tan importante tenerlo. Y sentirte bien contigo. Tener una buena relación contigo misma.
“Cuando quieres a alguien, siempre hay cierta dependencia. Querer implica tener algo de dependencia de esa persona”. A mí me tranquilizó, porque si ella que para mí era un referente en integridad, relaciones… estaba diciendo que también tenía dependencias emocionales, es que yo no era tan y tan bicho raro.
1º aceptarlo, Quererlo, diversificarte y no dejarte arrastrar por la fuerza ni la intensidad de los hechos.
A mí me está pasando justo ahora.
A veces pasa por tu vida una persona que te genera un enganche especial. Y está super bien que te genere eso porque es una sensación super bonita. Pero el quid de la cuestión es como siempre hacerlo con moderación. De una forma que no duela para que pueda perdurar en el tiempo.
Yo durante mucho tiempo, cuando aparecía en mi vida una persona o un sentimiento así, quitaba a la persona de mi vida para que no me hiciera daño mi dependencia emocional. Lo hacía como podía. No sabía hacerlo mejor, y está bien. Pero me quedaba sola y me perdía a esa persona al final.
Con el tiempo he aprendido a poder mantener a esa persona en mi vida pero sin que se me lleve por delante. ¿Y cómo se hace? me preguntarás:
Mira, primero darte cuenta de lo que te está pasando. Aceptar que eres una persona emocionalmente dependiente y a veces te ocurren esas cosas. De tanto en tanto aparece una persona y tienes tendencia a engancharte.
Luego tener muy presente el dolor que te produce cuando te dejas arrastrar por todo eso y vas a caída libre. Tienes que hacer algo para conseguir vivirlo sin que se te lleve por delante. O sea, decidir quedarte pero hacer algo para aprender a vivir con ello.
A mí me funciona muy bien diversificarme. Equilibrio. Y para ello me he creado una vida en la que me reparto en muchas pequeñas cosas. Eso es lo que trato de construir con mis clientes cuando trabajo con ellos. Y una vida muy consciente.
El trabajo es inevitable que sea mucho, la pareja también, pero tiene que haber variedad. Y sobre todo estar tú que eres lo más importante.
Tengo un poco de obligaciones caseras al día, de hobbies, de ejercicio, de estudio, variedad de personas… Y esto me da el equilibrio.
Conclusión
Este imperio he tardado muchos años en crearlo y todavía estoy en ello, cada día de mi vida. Pero es a lo que me aferro cuando aparece esa fuerza imperiosa de las dependencias emocionales y pretende arrastrarme por la riera.
Ahora ya no tengo que renunciar a las personas o cosas que me producen esas dependencias y todos los sentimientos que me ocasionan. Pero tengo que hacer cosas específicas que no me salen todavía naturales, para poder seguir con mi vida y poder sobre llevarlo. Y así voy haciendo, al principio no será fácil, ya que no es sencillo borrar de la noche a la mañana lo que se lleva toda una vida haciendo, sin embargo es posible y cuando te decidas a hacerlo, te sentirás cada vez mejor.
Si quieres que te oriente sobre tu pareja y te informe sobre mis terapias de pareja, contacta conmigo a través del formulario.
No te conformes con menos de lo que mereces.